lunes, 23 de septiembre de 2013

Prologo 2

Estaba totalmente aburrida, era un silencio abrumador, me encontraba sola, sentada en el mueble principal de la sala, mirando al vacío y escuchando como empezaba a caer la lluvia, de repente e inexplicablemente una tristeza inundo mi ser, me di cuenta de que estaba sola, completamente sola, no era un sentimiento de dolor era mas bien un sentimiento de nostalgia, apuesto a que si alguien me hubiera recordado lo mal que la había estado pasando en ese tiempo, mis lagrimas saldrían sin control, por eso, de algún modo estaba agradecida de no estar con nadie...

Ya había estado haciendo absolutamente nada un buen tiempo, por alguna razón, por un lapsus de locura momentánea, con rapidez antes de permitirme dudar levante el teléfono y marque un numero al azar, es decir, ni siquiera me di cuenta cual fue el numero, estaba nerviosa, me templaban las piernas, mis manos se sacudían a voluntad y hasta empezaba a sudar incluso en un día tan frió...


Fue una espera algo larga, parecía que nadie iba a contestar, estaba a punto de colgar cuando de repente... un chico contesto e inmediatamente dije:

-Hola
Se notaba que estaba extrañado, creo haberle hablado algo afanada, nerviosa y hasta agradecida... Es que NO SABIA QUE HACER, me sentí aliviada al escuchar su voz, era algo tosca, parecía enojado,pero igual me sonó humilde ese corto y dudoso
-Hola?
Rápido y sin siquiera pensarlo empecé una conversación
-Como esta?
No puedo olvidar los nervios que tenia y como me hicieron aparentar una seriedad intachable
-ammmm.... bien?
-Que bueno me alegra
-Espera!!! ¿Quien eres?
Al momento de el decirme eso mis piernas temblaron, fue tanto lo que temí que se diera cuenta quien era, ambos eramos extraños, era lógico que quisiera saber con quien hablaba, pero, pero ¡No quería que supiera mi nombre!... 

Simplemente evadí la pregunta hasta el punto de que no nos importara, hablamos por unos 5 o 7 minutos, reíamos como si nos conociéramos de siempre y simplemente no supe la razón de por que tenia tanta confianza con el, llegue a pensar hasta que en ese momento podría contarle mis mas profundos secretos pero NO, A QUIEN CARAJOS SE LE OCURRIRÍA ESO????, después de darme cuenta de lo rara que estaba siendo, no tuve mas opción o mas bien no pensé en otra solución que despedirme bruscamente de el para luego quedarme nuevamente en el silencio, sentada en el mismo mueble, viendo al mismo punto, solo que esta vez pensando en ¿Quien habrá sido el?...


Igual no tuvo relevancia en mi, no hasta que...


2 comentarios: